Parque Nacional Okatse

Nuestro segundo día en Kutaisi lo dedicamos a visitar el Parque nacional Okatse. Está a aproximadamente horas y media de Kutaisi. Cuando llegamos al aparcamiento, unos chicos nos ofrecieron acercarnos al cañón en jeep por 5 laris por persona ya que el camino no era apto para coches. Amalia no pudo ir al cañón por altura, ya que los niños más bajos de 120 cm no podían entrar, así que Sebas decidió quedarse con ella y esperarnos.

Todos los demás fuimos en jeep por un camino muy abrupto y empedrado por el que transitaban jeeps en ambas direcciones. Efectivamente, nuestros coches no hubiesen podido llegar. El jeep te deja en la entrada del cañón, que está habilitado con pasarelas suspendidas en el aire. Pasar por ellas da bastante respeto porque el cañón es muy profundo y la pasarela cuelga literalmente de la pared de la montaña.

Se hace un camino circular y al final te vuelve a recoger el jeep. De la experiencia disfrutamos todos, y los niños especialmente. Para compensar, Amalia se estaba comiendo un paquete de palomitas, un helado y se bebió un Sprite 😊.

Antes de continuar comimos en uno de los restaurantes cercanos y continuamos con el jeep hasta la cascada Lomina con un pequeño lago en el bosque. Para llegar es necesario un 4×4, y el último tramo se hace a pie. El lugar es muy bonito, merece la pena, pero el agua está helada, aún así hubo un par de personas que se atrevieron.

Nuestro último destino dentro del parque fue la cascada Kinchkha, a la cual también se accede fácilmente por pasarelas. Las imágenes ya hablan por sí mismas.

Antes de acabar el día, Sebas y Joan Carles insistieron en visitar tskaltubo, una ciudad balneario de la época soviética con muchos balnearios y edificios del régimen abandonados. Visitamos un par de ellos aún habitados por gente de pocos recursos y otro que, a pesar de la valla, Sebas consiguió fotografiar por dentro.

Tras el intenso día, nos quisimos cenar en el hotel y paramos en Kutaisi, primero para beber unos vinos que nos sorprendieron gratamente y luego la última cena para despedir a Nati y Jaime.

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